Para mejorar la gestión de tu take away es imprescindible, primero, conocer perfectamente a tu cliente tipo; y segundo, diferenciar esta parte de tu negocio gastronómico de tu servicio de sala o de cualquier otro que ofrezcas. Esto, por supuesto, entre otros muchos factores que ahora comentaremos.
Las circunstancias económicas y sociales vividas durante la pandemia han dado lugar a un auge de este nuevo modelo de negocio. En mitad de la tesitura de seguir o no adelante, han sido muy numerosos los restaurantes más o menos tradicionales que han visto en el take away un poco de luz y esperanza para sus empresas. Sin embargo, muchos no habían ofrecido nunca este tipo de servicios y probablemente no pensaban hacerlo. Al menos mientras su comedor siguiera funcionando. Por esta razón, es muy posible que no estén obteniendo el rendimiento óptimo. Porque necesitan pararse a pensar si la gestión de su take away está siendo la más correcta.
Hoy en Manageat, tus expertos en gestión de negocios gastronómicos, vamos a intentar darte las claves de una óptima gestión de tu take away a través de varios consejos que engloban prácticamente todos los aspectos de este modelo de restauración. Confiamos en que nuestro artículo pueda resultarte útil o al menos inspirador. Vamos allá.
Claves para optimizar la gestión de tu take away
Desde el punto de vista de la gestión interna
- Habilita una zona separada del restaurante para atender tu take away. Y por supuesto, cuida su imagen. Comenzamos con el espacio, un elemento que se deja de lado por pensar erróneamente que no es importante, porque como el cliente no se queda en el local… Tanto si tienes un take away ofrecido conjuntamente con el servicio de sala como si tu negocio se basa en comida para llevar sin más, el lugar destinado a atender a tus clientes de take away es fundamental. En el primer caso, resulta imprescindible diferenciar esta zona para evitar errores, retrasos en las entregas y posibles molestias a los clientes e incluso al servicio de sala. Si tu negocio únicamente dispone de servicio de delivery o de recogida en el local, está claro que la imagen de tu espacio determinará que el cliente se convierta en fiel o no vuelva más.
- Designa a un empleado responsable del take away. Tanto en cocina como en la preparación y/o entrega de la comida. Es decir, una persona que supervise que los pedidos salen correctamente y a tiempo, así como otra que atienda al cliente si la comida se recoge en el local, o que controle el delivery si se lleva a domicilio. Ten en cuenta esta recomendación sobre todo si compatibilizas tu restaurante con el servicio de take way. Las responsabilidades de cada empleado deben estar muy claras, si no este servicio se puede ver delegado a un segundo plano y provocar, además, situaciones incómodas entre la plantilla.
- Valora la posibilidad de ofrecer un horario más amplio. Una de las particularidades de este modelo de negocio es su flexibilidad y disponibilidad. Y no sólo en cuanto al espacio (es decir, que te lleven la comida a donde tú quieras) sino también en lo referente al tiempo. Así, siempre que puedas gestionar los turnos en tu negocio gastronómico, sería ideal aumentar el horario de comidas para llevar. Más aún incluso en temporada baja. Ten en cuenta que fuera de las horas habituales de comidas y cenas necesitarás muy poco personal para atender el take away.
- Gestiona las reservas eficazmente. Para una perfecta gestión de un take away, canalizar y administrar las reservas eficazmente es imprescindible. Primero, aprovecha todos los canales que puedas: walk in, reservas telefónicas, web, redes sociales, whatsapp, etc. Si cuentas con un buen programa de gestión de reservas enlazado al motor de reservas de tu web, tan solo tendrás que ir incluyendo las directas en el programa. Y si no, existen channel managers para restaurantes que te ayudarán en esta tarea. Recuerda siempre lo importante que son los datos para cualquier negocio y este tipo de software te ayudará a recopilarlos adecuadamente. Después, para interpretarlos correctamente, nosotros te ofrecemos una solución.
- Conoce a tu cliente. Para ello, trata de definir a tu buyer persona, algo que puede que parezca anodino pero que te servirá para encauzar mucho mejor tus ventas. Ten en cuenta que si también tienes un restaurante tradicional, probablemente tus clientes de mesa no sean los mismos que los del take away. Por eso, deberías definir estrategias diferentes para cada parcela del negocio.
Desde la perspectiva de las operaciones
- Elige bien los platos. Para la gestión correcta de tu take away está claro que la elección de los platos que vas a ofrecer es clave. Por muy bien que administres tu negocio de comida para llevar, si el producto no es el adecuado… Es, por ello, primordial que estudies las condiciones de cada uno de tus platos y decidas con fundamento cuáles puedes incluir en tu servicio de take away. Por unas razones o por otras, hay comidas que no se prestan al servicio de take away, porque no llegan en las condiciones adecuadas. Tenlo siempre en cuenta si no quieres que tus ideas fracasen antes de empezar.
- Crea propuestas de menús cerrados. Sabes de sobra que los clientes necesitan que les facilitemos la vida: no cocinar y pedir que la comida se la lleven a casa es ya una evidencia. ¿Por qué no facilitarles también el proceso de elegir? Proponles menús cerrados que se adapten a sus gustos (recuerda la importancia de conocer a tu cliente) y prepárate para triunfar. Te lo van a agradecer.
- Incluye productos extra. Como puede ser la bebida, el postre, un aperitivo, etc. Todo lo que haga que el menú para llevar se vea más completo y a ti te resulte más rentable.
- Cuida la presentación. Exactamente igual que si fuera un plato servido en mesa. Somos conscientes de las dificultades de algunos platos para conseguir que se vean realmente apetecibles… Pero es que la presentación es muy importante. Si los platos van a llegar con mala cara, mejor sustitúyelos por algo menos problemático.
- Agiliza la preparación del packaging. Es decir, ten preparados los elementos no comestibles (servilletas, palillos chinos, etc.) o los propios envases con antelación para que la comida no tenga que esperar. Si pretendes realizar una óptima gestión de tu take away, el tiempo es una variable mucho más importante incluso que en el servicio de mesa.
- Utiliza un packaging sostenible. El planeta, tus clientes y la imagen de tu negocio te lo van a agradecer. Si quieres algunos consejos, no te pierdas nuestro artículo sobre packaging.
- Potencia tu imagen de marca en los envases. Porque tus envases y las bolsas o cajas que utilices para su transporte son un excelente canal de publicidad. Y además serán un elemento más apara que el cliente te recuerde. Personaliza tus envases con tu logo. E incluso con notas a mano, si así lo deseas, de agradecimiento, o con pequeños mensajes, citas… Bienvenida la imaginación.
- Incluye un ticket descuento o alguna promoción junto con la comida. La gestión de un take away también necesita de acciones de fidelización para sus clientes. Prueba a incluir descuentos, bonos regalo de algún producto o cualquier tipo de promoción que se te ocurra y que te merezca la pena. Seguro que tu clientela querrá aprovechar dichas ventajas.
- Informa de la hora de entrega o de recogida. Y sé puntual. Tanto si es para recogida en el local, como si tienes que entregarlo a domicilio. Date un margen de error, pero que lo sepa el cliente para que no sienta que se le está prestando un mal servicio. Si eso ocurre, aunque tus platos sean un manjar, puede que el retraso estropee toda la experiencia.
- Integra varias formas y canales de pago. Seguimos con la necesidad de facilitar la vida a la gente. Tarjeta, paypal, bizum, etc., e integra los que puedas en tu web. Nadie tendrá excusas para convertirse en tu cliente.
- Ofrece experiencias. Porque pedir comida para llevar no tiene por qué ser sólo comer. Incluye un agradecimiento, cuida los envases y la presentación, no olvides tu tarjeta y alguna promoción, y según el tipo de menú (infantil, degustación, romántico, etc.) puedes incluso ofrecer algún pequeño detalle. Como hacen las grandes cadenas de comida rápida, ésas que de take away y delivery saben un rato.